Icono del sitio Hablar con Jesús

16 de Julio, Fiesta de la Virgen del Carmen

Virgen del Carmen

Existe un grupo de mujeres, madres, hijas, jóvenes y mayores, profesionales y amas de casa, dedicado a propagar el culto de la Virgen del Carmen a través de obras de apostolado, de piedad y caridad, se mueven por el deseo que la Virgen del Carmen sea conocida y venerada.

¡Llevan más de 300 años venerando a la Virgen del Carmen! Son las Camareras de la Virgen del Carmen

Desde casi 200 años atrás, en Chile se ha dedicado los días miércoles para honrar y expresar cariño a la Virgen del Carmen. Esto, debido a la «divina coincidencia» de que algunos acontecimientos históricos importantes para el país, donde se reconoce la protección y asistencia especial de María, ocurrieron un día miércoles.

Por eso los miércoles las camareras se reúnen en la capilla del Santuario de la Virgen y asisten a misa junto a la venerada imagen de la Virgen del Carmen. En ella, piden por las camareras fallecidas y enfermas.

Las camareras de la Virgen del Carmen

En un principio, en Chile, la Cofradía de la Virgen del Carmen estaba formada exclusivamente por hombres. Sin embargo, en 1858 la necesidad de que mujeres se encargaran de la atención y ornato personal de la Imagen de la Virgen y sus pertenencias dio origen a la rama femenina de la Cofradía, hoy llamadas Camareras.

El origen de la palabra camarera viene de la palabra cámara. Hace alusión a la habitación de la reina, siendo las camareras las únicas autorizadas a ingresar a ella.

La primera y principal misión de las Camareras es demostrarle a la Santísima Virgen su amor a Ella y transmitir a los demás el cariño de la Madre de Dios, a través de su trabajo voluntario, espontáneo y desinteresado, como también a través de sus oraciones y participación en la Iglesia.

Para llevar a cabo su misión, algunas de las acciones que deben realizar son:

Privilegios y gracias especiales de las camareras:

Su distintivo es un gran Escapulario de género café donde aparecen impresas, por un lado, la imagen de la Virgen del Carmen, y por el otro, el escudo carmelita.

¿Quién es la Virgen del Carmen?

La Virgen María es una sola, es la Madre de Jesús y por ello Madre Nuestra (Juan 19, 26-27) y se ha aparecido a los hombres en distintos momentos de la historia, tomando las vestimentas y rasgos de la comunidad o nación a la cual se dirige. Es por ello que se le conoce con distintos nombres o advocaciones, siendo una de ellas la Virgen del Carmen, quien toma su nombre del Karmel o Monte Carmelo, emplazado en la costa mediterránea de Israel.

Desde siempre los cristianos hemos visto a la Virgen María como amparo y refugio de los pecadores, donde acudimos a protegernos en momentos de mayor tentación o grandes dificultades y para que nos ayude a cumplir la voluntad de su Hijo en nuestra vida.

María se pone en medio de Dios y los hombres, es decir, ocupa el papel de mediadora, como madre consciente de que como tal tiene derecho a hacer presente a su Hijo, nuestras necesidades.

El profeta Elías y el Monte Carmelo

Como relata el Primer Libro de los Reyes, el pueblo hebreo pidió al profeta Elías que intercediera por él ante el Señor, por la gran sequía que sufría el país. Por ello, Elías prometió a Dios que el rey Ajab y el pueblo abandonarían al dios Baal y así Él terminaría con los sufrimientos de los habitantes de la región.

Elías subió al Monte Carmelo varias veces a orar hasta que finalmente apareció una señal: «Cuando volvió la séptima vez, subía desde el mar una nubecita no más grande que la palma de la mano» (1 Rey 18, 44).

A partir de la lluvia que trajo la señal de la nube, el Monte Karmel o Monte Carmelo –cuyo nombre significa jardín- se convirtió en un lugar sagrado. Hasta allí y por cientos de años llegaron a vivir ermitaños que se dedicaron a la oración y que con el paso de los siglos fueron llamados monjes carmelitas.

Su Mensaje y Devoción

El domingo 16 de julio de 1251, estaba San Simón Stock, Superior General de los Padres Carmelitas del convento de Cambridge, Inglaterra, rezando por el destino de su orden, cuando se le apareció la Virgen María.

Estaba vestida de carmelita y acompañada de una multitud de ángeles, llevando al Niño Jesús en sus brazos y en su mano un hábito en miniatura, que le entregó diciendo:

«Recibe hijo mío este Escapulario de tu orden, que será de hoy en adelante señal de mi confraternidad, privilegio para ti y para todos los que lo vistan. Quien muriese con él, no padecerá el fuego eterno. Es una señal de salvación, amparo en los peligros del cuerpo y del alma, alianza de paz y pacto sempiterno».

Cabe resaltar que lo singular de la aparición de la Virgen a Simón Stock –a diferencia de otras apariciones- es que la Virgen del Carmen aparece con su Hijo Jesús en brazos como su tesoro más preciado y como invitándonos, una vez que nos revistamos del escapulario, a que su Hijo, el mismo Dios, sea también nuestro tesoro. Porque la Virgen es camino hacia su Hijo, vía directa hacia Jesús; la Virgen nos presenta a su Niño para que le amemos y nos invita y ayuda a acercarnos a Él.

Devoción Filial a la Virgen del Carmen

La devoción filial a María es parte integrante de la vocación cristiana. Existen varias maneras de honrar y venerar -y no adorar- a María, pero tal vez la devoción preferida por Ella, y por la cual el pueblo cristiano ha recibido innumerables gracias, son el Escapulario y el Santo Rosario.

El Escapulario es un signo de consagración a la Virgen del Carmen y un sacramental de la Iglesia, es decir, un objeto religioso aprobado como signo que nos ayuda a vivir cristianamente.

Por otra parte, el Santo Rosario es una de las oraciones más hermosas a la Madre del Salvador, quien en innumerables apariciones ha pedido que lo recemos. Al hacerlo vamos meditando junto a ella los misterios centrales de la vida de Jesús.

Un regalo para Chile

Hace años nuestra Madre quiso honrarme con un regalo ofreciéndome ser su camarera, hoy le pido yo a Ella junto a todas las camareras y en representación de todos los chilenos que nos dé un gran regalo: “que forme de Chile un pueblo para Dios”.

Estamos viviendo nuevamente una gran amenaza en nuestra Patria, una guerra ideológica, que pretende destruir la familia, la religión, el cuidado de la vida, el amor a la Patria y toda forma de respeto a la dignidad de la persona y a la autoridad.

Santísima Virgen del Carmen, Reina y Patrona de Chile, Estrella de su bandera y Generala de los Ejércitos de Chile, hoy venimos a suplicarte por esta Patria querida, este trocito de cielo que se extiende entre la cordillera y el mar, que lo cubras con tu manto y alejes de él, todo mal.

(Todo el material bibliográfico y los cuadros se encuentran en nuestra página Web: www.camareras.cl)

No hay excusa que valga para nosotros

PARA NO DEDICARLE TIEMPO A DIOS AHORA

¡Suscríbete y recibe
una meditación cada día!

HAZ CLICK AQUÍ

Salir de la versión móvil